El Rolls-Royce Phantom II nace como respuesta a las peticiones de sus selectos clientes. En 2017 nació la octava generación de este exclusivo coche de lujo, que ahora recibe una actualización en la que se revisa la estética y el equipamiento tecnológico con el fin de llevar el modelo a un nivel superior, si es que existe. Según la marca, el Phantom II incluye mejoras visuales y estéticas ‘ligeras’ basándose en las solicitudes de los clientes.
Es cierto que es complicado llevar el Phantom a un nivel superior, pero lo cierto es que parece que lo han conseguido. La marca nos tiene acostumbrados a rizar el rizo consiguiendo auténticas obras de arte para dejarnos con la boca abierta, como ocurre con este Rolls-Royce Boat Tail. ¿Lo conseguirá con el Rolls-Royce Phantom II? Lo comprobaremos en las próximas líneas.
Rolls-Royce Phantom II, ¿cómo es?
Estéticamente, el Rolls-Royce Phantom II ha recibido unos pequeños retoques. La parrilla frontal incorpora un marco oscuro e iluminación LED al estilo BMW, que puede iluminar la silueta del Espíritu del Éxtasis como opción. La firma lumínica de los faros también recibe un ligero cambio incluyendo luces de estrella de bisel cortadas con láser.
En el lateral, son las nuevas ruedas las que se llevan toda la atención. Estas llevan unas llantas con toque retro. Son de acero inoxidable, están fresadas con elementos triangulares en 3D y están disponibles en acero inoxidable pulido, parcialmente pulido o negro lacado. Su tamaño es de 21 pulgadas.
¿Y por dentro?
En el interior del Rolls-Royce Phantom II recibe pocas actualizaciones a nivel estético. Su volante es más grueso, lo cual se une a una nueva tapicería de tela fabricada con fibras de bambú en Italia para la fila trasera de asientos como novedades más destacables. Además, la cerámica impresa en 3D, la madera y el cuero también aparecen en ciertos revestimientos y molduras interiores.
Pero no es aquí donde más se notan los cambios. Es el apartado tecnológico el que más avanza en este Rolls-Royce Phantom II. Incorpora un nuevo sistema de infoentretenimiento denominado Rolls-Royce Connected. Junto a la aplicación Whispers, permite al usuario interactuar con el coche para poder consultar su ubicación, compartir futuros destino e incluso gestionar el mantenimiento con el servicio oficial más cercano.
Todas estas actualizaciones no han querido modificar mucho el modelo. Solo se busca modernizar y mejorar algunos aspectos sin perder la esencia del vehículo. Los propios clientes querían esto y la marca ha atendido a sus peticiones. Por tanto, el motor sigue siendo el mismo. Bajo el capó del Rolls-Royce Phanton II sigue estando el bloque de 6.75 litros biturbo V12 capaz de desarrollar 571 CV y 900 Nm de par máximo.
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Siendo niño devoraba las revistas de coches que mi padre compraba cada semana. No podía imaginar que con los años tendría la oportunidad y el privilegio de escribir sobre ellos. Profesionalmente he cogido muchas curvas que he trazado de forma firme, asumiendo riesgos que me han llevado a metas insospechadas. ¿Quién dijo miedo?