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5 coches modernos que serán futuros clásicos

Y que echaremos mucho de menos.

coches futuros clásicos

No hace tantos años vivimos una época en la que el sector automovilístico estaba repleto de grandes joyas y emblemáticos modelos que tenían garantizado un hueco en el corazón de todo petrolhead. Sin embargo, la industria contemporánea se ha encargado de crear vehículos que carecen de ese alma o espíritu, motivo por el que resulta difícil encontrarnos con coches que sean futuros clásicos.

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No obstante, y para nuestra suerte, sí que existen una serie de modelos que tienen muchas papeletas para ocupar el corazón de las futuras generaciones y provocar que suspiren al pensar en ellos. Coches que se han alejado de ese concepto de electrodoméstico con el que desplazarse del punto A al punto B y son capaces de transmitir emociones ya no solo al conducirlos, sino al verlos por la calle. Con esta premisa, hoy os traemos una lista con cinco coches que se terminarán convirtiendo en futuros clásicos.

5 coches que serán futuros clásicos

Toyota GR Yaris

Hacía mucho tiempo que una marca no se encontraba en la tesitura de tener que crear una variante de producción de un coche de competición para poder homologarlo; y cuánto nos alegramos. Esto es exactamente lo que le ha pasado a Toyota, que después de haber trabajado prácticamente en exclusiva con vehículos híbridos ha decidido dar un golpe maestro de la mano del nuevo Toyota GR Yaris.

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Y es que detrás de este atrevido utilitario deportivo se esconde una puesta a punto más propia de un vehículo de competición que de un coche de calle. Su motor de tres cilindros sobrealimentado por turbo es capaz de desarrollar 261 CV de potencia, cifra que se gestiona por medio de un cambio de manual y un sistema de tracción total inteligente bautizado como GR Four. Sin lugar a dudas, el GR Yaris tiene un hueco garantizado en los anales de la historia y está llamado a ser uno de esos coches que serán futuros clásicos.

Audi R8

Cierto es que la producción en masa del Audi R8 no ayuda a considerarlo un vehículo demasiado exclusivo dentro de su ya exclusivo segmento, pero cuenta con un ingrediente en su receta de lo más inusual. Así es, nos referimos a su colosal motor V10 de 5.2 litros atmosférico que hace acto de presencia tanto en esta generación como en la primera.

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Teniendo en cuenta que esta configuración de motor está prácticamente erradicada y que la sobrealimentación y el downsizing están a la orden del día, no resulta descabellado pensar que uno de los últimos motores V10 contemporáneos tenga cabida en el hall de la fama.

Lamborghini Huracán

El Lamborghini Huracán es uno de los superdeportivos más lustrosos y aclamados de los últimos años, y entra por todo lo alto en este ranking por el mismo motivo que su primo hermano alemán, el Audi R8. Y es que ambos superdeportivos comparten mecánica, aspecto que provoca que ambos puedan tener un futuro muy similar.

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En la prueba que acabas de ver te lo contamos todo con pelos y señales, pero no cabe duda de que ese V10 de 5.2 litros capaz de rendir hasta 640 CV de potencia tiene todas las papeletas para convertirse en uno de los motores más deseados en un mañana. ¿Uno de los coches que serán futuros clásicos? Más bien un clásico contemporáneo, porque ya ha pasado a la historia de la marca italiana.

Subaru BRZ

El nuevo Subaru BRZ sigue siendo la prueba irrefutable de que aún es posible hacer deportivos con ingredientes de la vieja escuela. Con esta premisa, el deportivo nipón tiene todas las papeletas para ser valorado como clásico en un futuro, debido a esta configuración y a que la producción es relativamente limitada.

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Esto es posible gracias al maridaje de un motor bóxer atmosférico de 2.4 litros (capacitado para desarollar 230 CV), con un cambio manual que envía la potencia única y exclusivamente al eje posterior. Desgraciadamente, esta segunda generación no llegará al continente europeo, aunque sí lo hará su primo hermano, el Toyota GT86.

Ford Mustang GT

Cierto es que la producción en masa del actual Ford Mustang no ayuda a que sea valorado monetariamente en un futuro, pero su condición mecánica en peligro de extinción sí que le puede abrir hueco en un futuro. Y es que teniendo en cuenta que estamos ante un coche que ya de por sí es un mito, es muy probable que el actual –y último– Mustang V8 se convierta en todo un clásico, como su antepasado de los años 60.

coches futuros clásicos

Valoramos su candidatura como uno de los coches que serán futuros clásicos gracias a su motor Coyote, un V8 de 5.0 litros atmosférico de los que ya no quedan. Desarrolla 421 CV de potencia, se puede comprar con un cambio manual de exquisito tacto y cuenta con una personalidad de la que pocos vehículos pueden presumir.

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