Os lo tengo que reconocer, a la hora de escribir este artículo tuve serias dudas de que versión del Mazda MX-5 de segunda mano elegiría. La verdad es que cualquiera de las generaciones del roadster nipón es digna de ser un coche usado altamente comparable y merecen un artículo independiente. Tras darle muchas vueltas a la cabeza y pensar cual me compraría yo, hasta el punto de verme seriamente tentado, el elegido por mi parte sería el NC, la tercera generación del modelo. En los siguientes párrafos te cuento el porqué elijo el Mazda MX-5 NC de segunda mano frente a la primera y segunda generación.
El Mazda MX-5 (prueba) o Miata, como prefieras llamarlo, es un roadster deportivo por naturaleza. Motor delantero longitudinal, tracción trasera, biplaza, descapotable y económico son los atributos que mejor definen a cualquiera de las generaciones. Nació como un deportivo económico capaz de hacerte disfrutar tras el volante en cada curva. La tercera generación de este modelo supo plasmar estos valores, mejorando uno de los puntos débiles de los anteriores MX-5: las calidades interiores.
La revolución de un icono
Antes de nada, me gustaría ponerte en situación y dejarte unas pinceladas de la historia del Mazda MX-5 de tercera generación. El Miata original había supuesto un tremendo éxito para Mazda. La receta de crear un roadster de tracción trasera económico funcionó a las mil maravillas. Por ello, cuando los de Hiroshima lanzaron la segunda versión se limitaron a añadir algunos ingredientes más a la mezcla sin cambiar demasiadas cosas.
Sin embargo, la tercera generación fue, más que una evolución, una revolución. Dentro de la compañía tenían claro cómo querían que fuera la nueva generación del Miata. Tenía que ser un coche que generase emoción al conducirlo, que llegase a transmitir sentimientos al conductor. Querían crear una relación entre el conductor y la máquina. Uno de los pilares de referencia del desarrollo era la filosofía japonesa Jinba Ittai, o la conexión jinete y caballo en perfecta sintonía.
Los valores que debía de tener esta tercera generación eran los mismos que los de generaciones anteriores. Tenía que ser un coche deportivo, ligero, compacto, que fuera divertido de conducir, con un diseño moderno pero que a su vez no perdiera la esencia del diseño del Miata original. Y a mi juicio lo clavaron, aunque es cierto que Mazda siempre lo ha clavado con cada generación.
Mazda MX-5 NC de segunda mano: ¿Por qué es interesante?
Después de todo lo que te he contado resulta obvio decir porque es interesante comprar un MX-5. Un coche con el que disfrutar conduciendo a cielo abierto, de tracción trasera y que encima es barato de comprar y de mantener. Pero realmente este eslogan es aplicable a cualquier generación del pequeño deportivo japonés. La cuestión aquí radica en dilucidar por qué la tercera generación es más interesante que la primera o la segunda. Dejamos fuera al Mazda MX-5 ND ya que aún se puede comprar nuevo.
El primer motivo que haría decantarme por el NC es su diseño. Ya se que el diseño es muy personal, y que este coche fue criticado justamente por ello. Pero el NC trae un diseño más fresco en el que Mazda apostó por la solidez visual. Los grandes y abultados pasos de rueda, las esquinas redondeadas, los faros incrustados en el paragolpes y un capó muy plano, configuraban una imagen más musculosa. Se mantenía el diseño de ovoide de su carrocería pero ahora el aspecto general era más potente y más nipón, si me lo permites. En mi opinión, es un coche que incluso hoy día se sigue viendo actual.
Otro aspecto por el que compraría el NC frente a otras generaciones es por su interior. Aquí Mazda pegó un tremendo salto adelante respecto de lo que se vio en el NB. Buenos acabados y ajustes en todo el interior, un diseño mucho más actual, más tecnología, una posición de conducción perfecta…Realmente es un coche en que puedes pasar horas y horas conduciendo.
Por otro lado, algo que sí que mantenía con sus antecesores era el tacto de conducción. Es un coche de esos que parece que te lee el pensamiento. Miras el vértice de la curva, apuntas con la dirección y el coche se tira directamente hacia donde le has indicado. Un coche con el que puedes fluir por las curvas gracias al amplio recorrido de suspensión.
En lo que a motores se refiere, en España se vendía con dos variantes del mismo bloque. El de acceso era un 1.8 y 126 CV, mientras que el más potente se trataba de un dos litros y 160 CV. En este último se ofrecía como opción un diferencial autoblocante de tipo torsen lo cual lo hace aún más interesante. Si lo que quieres es ir rápido y no solo pasearte con tu descapotable por la ciudad, el dos litros es el que tienes que comprar. Ya no solo por la diferencia en la potencia, si no también por la entrega de par más plana. Prácticamente tienes motor en todo el rango de revoluciones.
Precio del Mazda MX-5 NC de segunda mano
El precio de los Mazda MX-5 de tercera generación en el mercado de segunda mano empieza aproximadamente en unos 6.000 euros. Si bien es cierto, que la opción más interesante es la que monta el motor 2.0, los cuales tienen precios algo superiores. A partir de unos 9.000 euros puedes encontrar un 160 CV del año 2007. Justamente el precio es otro de los factores que me ha llevado a decantarme por esta tercera generación.
En los últimos años ha crecido tremendamente la demanda de las unidades de la primera y segunda generación. Debido a ello ha subido el precio una barbaridad. Incluso hoy en día es posible encontrar buenas unidades del NC más baratas que algunas unidades de dudosa procedencia del NA y NB.
Si tras leer este artículo te has enamorado del coche hasta el punto de querer comprar uno, hay algunas cosas que debes de revisar. Es un modelo muy fiable en todos los aspectos. Su motor es por cadena lo que supone una tranquilidad. Por un lado, debes de revisar el estado general de la capota para asegurarte de que no entra agua ni aire al interior.
Mientras tanto, no olvides echarle un ojo al agua del refrigerante. Mazda recomendaba sustituirlo cada dos años debido a la oxidación que podía producirse. Si no sabes si lo han cambiado, lo mejor es hacer una limpieza de todo el circuito y cerciorarte que elementos como el termostato y la bomba de agua funcionan correctamente. Más allá de eso, si es una unidad bien mantenida, no es un coche que presente problema alguno. Este coche es un claro ejemplo de la famosa fiabilidad japonesa.
Con las ventas de los SUVs en alza y con la imagen de “solución de movilidad” que está tomando el coche frente a la de “elemento pasional”, hacen que cada vez sea más complicado ver este tipo de coches en los concesionarios. Por cómo se conduce, por lo que transmite y por su precio el Mazda MX-5 es digno de ser un CUAC.
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Si de pequeño Obélix se cayó a una marmita llena de poción mágica, yo me caí dentro de un gran bidón de gasolina. Desde entonces todo lo que lleve cuatro ruedas y se conduzca con un volante se ha convertido en mi gran pasión. Ahora tengo la suerte de poder compartirlo a través de HolyCars.