¿Son las ayudas del Gobierno para comprar coches nuevos después de la crisis del coronavirus útiles de verdad o se trata de un completo engañabobos? ¿Es postureo? Estas medidas para impulsar la venta de coches nuevos fueron anunciadas unos pocos días. Sin embargo, después de mirarlas con detalle no tengo nada claro que realmente ayuden al usuario medio a la hora de hacerse con un vehículo nuevo.
Vaya por delante que todas las ayudas del Gobierno para comprar coches nuevos siempre son bienvenidas. Pero creo conveniente analizar el enfoque desde el que se han hecho, ya que es posible que pudiese haber sido otro más correcto. Efectivamente, hay cosas que no se acaban de entender. No obstante, confiemos en que la gente se anime, las marcas hagan buenas promociones y el sector consiga remontar los horribles números de estos últimos meses.
Los mejores coches para aprovecharse de las ayudas del Gobierno
Ayudas del Gobierno para comprar coches: ¿útiles o engañabobos?
Manos a la obra. ¿Cuáles son las ayudas del Gobierno para comprar coches nuevos? La partida destinada a este cometido es de 250 millones de euros y se supone que esta cantidad estará activa hasta el año 2022… a no ser que se acabe antes. Se repartirán desde 300 euros hasta 4.000 euros por unidad matriculada por parte del Gobierno dependiendo del tipo de modelo que se compre. O mejor dicho, de su sistema de propulsión.
Los coches que tienen más subvención son, como es lógico, los más ‘verdes’. Es decir, los eléctricos y los híbridos con la etiqueta 0 de la DGT. Pero eso no es todo, porque a esas ayudas del Gobierno para comprar coches nuevos también hay que añadir un extra del que se encarga el propio concesionario. Estos doblarán la cantidad aportada por las arcas públicas siempre que esta no supere los 1.000 euros, ese es su tope.
Además, debes saber que el precio no puede superar los 45.000 euros en el caso de los 100% eléctricos y/o para personas de movilidad reducida, ni los 35.000 euros en el resto de supuestos. Muy bien, hasta ahí está todo claro. Y lo cierto es que se han establecido baremos bastante altos, lo que supone poder elegir entre una gran variedad de modelos dados los precios. Pero espera, que no todo es tan bonito.
Los descuentos de antes: casos prácticos
En este momento, las ventas de coches eléctricos en España son prácticamente nulas. Bien es cierto que están en pleno crecimiento, pero eso se decía hace unos cuatro años y el nivel de matriculaciones sigue más o menos igual. Pongamos que, al ser SUV pequeños, utilitarios y compactos los segmentos más vendidos, el precio medio de venta por unidad en nuestro país ronda los 18.000 euros. O mejor, 20.000, para redondear.
Una de las ayudas del Gobierno para comprar coches que más triunfará es la de 1.000 euros del Gobierno más otros 1.000 euros del concesionario. Corresponde a los vehículos con etiqueta ECO, de la que ya disponen mucho gracias a los sistemas de micro hibridación, hibridación, utilización de combustibles alternativos como el GLP o el GNC… Es decir, que por un modelo que cueste 20.000 euros el cliente final pasará a pagar 18.000 euros. Hasta ahí bien.
Lo que pasa es que esos 2.000 euros de ahorro suponen el 10% de ahorro, la mitad asumida por el Estado y la otra por el concesionario. Pero… ¡ajá! Según apuntan los compañeros de Voz Pópuli, hasta ahora el descuento medio sobre el precio de un coche nuevo en España superaba los 4.400 euros por unidad. Eso el año pasado. Por lo tanto, y solo en teoría, incluso con las ayudas del Gobierno para comprar coches nuevos el ahorro sería incluso menor.
Todo depende de lo bien que se porten los fabricantes con sus acciones comerciales, pero no es descabellado pensar que estas se reducirán dado que el dinero llegará desde el Estado. Con esto el beneficiado final sería el propio fabricante, que aumentaría su margen comercial por vehículo vendido, y no el comprador del coche, quien tendría un descuento similar o incluso menor. Y ni siquiera eso, porque sería una ayuda, y no un descuento. Mucho ojo con eso.
¿Ayuda o descuento? Saluda a los amigos de Hacienda
He aquí otro de los grandes problemas: la parte del Gobierno es una ayuda, y no un descuento. Por lo tanto, esa cantidad tendrás que declararla en tu declaración anual de la renta como una ganancia patrimonial sometida a un gravamen aún no estipulado, pero que podría suponer hasta varios cientos de euros. Para que te hagas una idea, los planes PIVE tributaban en base a la consulta vinculante V1679-16 de 19 de abril.
Es de suponer, por tanto, que con estas ayudas del Gobierno para comprar coches nuevos estén sometidas también a ella o a alguna similar. Y no olvides que para beneficiarte de ellas tendrás que achatarrar un coche con más de 10 años de antigüedad. Esto en muchos casos será un sinsentido, pues ese coche podría costar bastante más que el ahorro final en muchos de los casos.
Conclusión: solo el tiempo despejará dudas
Para saber la utilidad de este plan será necesario dejar pasar el tiempo. Lo correcto sería tener certeza de qué pasaría en este supuesto y en uno en el que se hubiesen lanzado otro tipo de ayudas, o ninguna. Lo que viene a ser un estudio de doble ciego. Pero como eso es realmente complicado en la práctica, dentro de unos meses sabremos cómo ha funcionado esta inyección económica al sector. Esperemos que sea completamente beneficiosa.
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De pequeño no tenía muchos amigos que no tuvieran ruedas. Esa marginación me ha hecho crecer hasta ser el gran (y humilde) profesional que soy hoy en día. Petrolhead incurable y adicto a mi trabajo; y va bastante más de un lustro. Me apasiona el sushi y tengo más imaginación que yo que sé. Gasolina de 98 para tomar aquí, por favor.