Los Volvo a 180 km/h son una realidad. Bueno, la realidad es que esa es la velocidad máxima a la que podrán circular los vehículos de la firma sueca a partir de su salida de la fábrica desde este mismo momento. Algo que desde la firma escandinava venden como un mensaje de seguridad, pero que en la realidad es arriesgado ya que puede hacerles perder más de uno y de dos clientes potenciales.
De esta manera, la velocidad limitada Volvo ya está en marcha. Cada modelo nuevo de la marca no puede superar esta cifra de 180 km/h. Entonces me pregunto yo una cosa: ¿qué pasa si te apetece meter el tuyo en un circuito de velocidad en una jornada de ‘tandas’ o circulas por la Autobahn alemana, que no tiene límite de velocidad? ¿De verdad tiene sentido esta maniobra por parte de Volvo?
Volvo a 180 km/h como máximo: ¿seguridad o ‘postureus máximus’?
Con este movimiento de limitar los Volvo a 180 km/h la firma escandinava sabe que se arriesga a perder muchos clientes. Sin embargo, para ellos es muy importante dar una imagen de seguridad, algo de lo que siempre han presumido en Gotemburgo. ¿Su objetivo? Acabar con las víctimas mortales por accidentes de tráfico, así como con las lesiones graves. Algo difícil pero, según ellos, posible con esta medida.
Además de esta limitación de Volvo a 180 km/h, los modelos de la compañía sueca incluirá Care Key. Esta función permite al conductor establecer limitaciones adicionales a la velocidad máxima. Su finalidad es tener el control ante jóvenes conductores, como hijos, o cuando se le presta el coche a terceras personas. Esto es bueno para la imagen de la marca, según Malin Ekholm, responsable del Centro de Seguridad de Volvo.
Así, Ekholm ha dicho que «estamos convencidos que los fabricantes de automóviles tenemos la responsabilidad de contribuir a la seguridad del tráfico. Nuestra tecnología de limitación de velocidad y el debate que ha suscitado son una consecuencia lógica de esta convicción. La limitación de velocidad y Care Key ayudan a los conductores a reflexionar y a darse cuenta de que correr es peligroso, aparte de darles una tranquilidad adicional y ayudarles a conducir de manera responsable».
Se trata de una decisión muy controvertida, pero las razones de la marca para defender que los Volvo a 180 km/h sea lo máximo a lo que puedan aspirar en cuanto a velocidad obedece a diversas razones. Una es que la seguridad integrada en el coche funciona mejor. Otra es dicho funcionamiento óptimo pero con las infraestructuras inteligentes. Y otra es que los conductores no son conscientes de los peligros de la velocidad.
Mi opinión
Por último, como conductor habitual y probador de coches me siento obligado a dar mi opinión de una forma muy breve. La velocidad, mal usada, es peligrosa, si bien no siempre es la causa del accidente per se, sino un agravante. Me parece mucho más importante, por ejemplo, controlar el alcohol y las drogas que ingieren los conductores, o las distracciones al volante relacionadas con móviles y dispositivos multimedia.
Está claro que si a eso le unes una velocidad que esté fuera de lugar el resultado sí que puede ser mortal. Pero me parece una falta de respeto mucho más flagrante alguien que vaya contestando WhatsApp mientras conduce, que los veo habitualmente, o alguien drogado, que tampoco son una utopía, antes que un conductor que va en su berlina de 60.000 euros a 140 km/h en una autopista. He dicho.
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De pequeño no tenía muchos amigos que no tuvieran ruedas. Esa marginación me ha hecho crecer hasta ser el gran (y humilde) profesional que soy hoy en día. Petrolhead incurable y adicto a mi trabajo; y va bastante más de un lustro. Me apasiona el sushi y tengo más imaginación que yo que sé. Gasolina de 98 para tomar aquí, por favor.