Saltar al contenido

Prueba del Mercedes Clase G 2022: ¡la bella y la bestia en un mismo coche!

Un modelo eterno.

Prueba Mercedes Clase G 2022

Esta prueba del Mercedes Clase G 2022 no ha hecho otra cosa que confirmar lo que los amantes de los coches sabemos desde hace muchos años. Esta bestia de la gama Mercedes es el mejor todoterreno que hay en el mercado. Y eso no se debe a que ya queden pocos 4x4 puros en los catálogos de las marcas, sino a que los alemanes han conseguido el equilibrio perfecto entre el más alto lujo y confort con unas capacidades off-road sobresalientes.

Suscríbete al canal de YouTube de HolyCars

El Mercedes Clase G es uno de esos mitos que llevan décadas entre nosotros y que merece seguir vivo a pesar de la cruzada contra los motores de combustión que existe actualmente. La marca de la estrella sigue apostando por él y nosotros también. Por todo ello, en Holycars hemos querido probarlo a fondo para poder hacer un análisis lo más completo posible de esta hermosa bestia. ¿Te interesa? Pues a continuación te lo cuento todo.

Prueba del Mercedes Clase G 2022

Un aspecto imponente y con clase

Hay algo encomiable en este Mercedes Clase G, y no es más que su fidelidad consigo mismo. No solo en lo que refiere a su comportamiento fuera del asfalto, algo de lo que hablaremos más adelante. Me refiero a su diseño. Este sigue siendo completamente distinguible como un Clase G. Se ha reinterpretado de una manera perfecta un todoterreno clásico en un coche del siglo XXI. ¿Una obra de arte? Para mí, sí.

Prueba Mercedes Clase G 2022

Predominan las formas cuadradas en un conjunto en el que destacan sus desmesuradas dimensiones. Estas son de 4.820 mm de largo, 1.930 mm de ancho y 1.970 mm de alto, un dato que realmente asusta. Será difícil, por no decir imposible, entrar en un parking. Por otra parte, su batalla o distancia entre ejes es de 2.890 mm. Otro dato a destacar es su altura libre al suelo superior a los 24 cm y necesaria para su esencia intimidatoria, al igual que las bisagras a la vista en puertas y capó. O los tiradores de puertas y maletero, que conservan adrede su característico sonido.

En la vista delantera encontramos un frontal en el que, aunque destaca por lucir una parrilla enorme con la estrella de la marca de generoso tamaño en el centro, tiene como protagonistas a unos faros redondeados con luces LED diurnas que son su sello de identidad. Su capó sigue igual y presenta unos pasos de rueda que sobresalen mucho del conjunto. Por otra parte los intermitentes, situados en los extremos del morro, son un detalle que me encanta y ayuda a maniobrar al dar visibilidad a los límites del morro.

Por el lateral parece una caja, pero no una caja cualquiera. Una con un encanto sin igual, con una línea cromada que marca con detalle su cintura. En la zaga hay un portón con apertura lateral y que lleva integrada la rueda de repuesto, otro guiño al pasado. Al igual que ocurre con sus grupos ópticos traseros, muy pequeños. No hay palabras para este modelo robusto e icónico. Bueno, sí: increíble.

Prueba off-road del Mercedes Clase G 2022: ¡a disfrutar!

Como decía anteriormente las cotas off-road del Mercedes Clase G, más allá de los 24,1 cm de altura libre al suelo, son impresionantes. Ofrece 31 grados de ángulo de entrada y 26 de ventral. En cuanto a la altura de vadeo, llega hasta los 70 Cm. ¿Querías un todoterreno de verdad? Aquí tienes uno capaz de pasar por cualquier sitio. Si algún obstáculo se lo pone difícil, lo tira abajo.

Prueba Mercedes Clase G 2022

Pero es que este Mercedes G conserva más elementos clave para ofrecer una magnífica conducción off-road, como el chasis de largueros y travesaños, una tracción total más solvente, diferenciales delantero, trasero y central con bloqueo y una reductora muy efectiva que permite cambiar a ella hasta a 40 km/h. También hay que destacar el G-Mode, un modo de conducción que se suma a los clásicos Confort, Sport, Eco e Individual.

Este nuevo Clase G ha pasado a integrar muchas de sus soluciones todoterreno en su electrónica, pero aun así sigue siendo el más efectivo de su categoría, no tiene rival. Modelos como el de la prueba del Ford Ranger Raptor 2021 pueden servir para hacer más el cabra en caminos y lugares rotos, pero no puede pasar por donde pasa este Mercedes Clase G.

Está claro que por su aspecto puedas pensar que se trata de un vehículo muy pesado y estás en lo cierto, pero su tonelaje no supone tanto como cabría esperar. Gracias al uso de aluminio en elementos como el capó, aletas y puertas, además de aceros ultra resistentes en diversos lugares, este monstruo es capaz de bajar de las dos toneladas y media de peso.

Prueba en asfalto del Mercedes Clase G: ¡poderío!

En el asfalto este Mercedes Clase G es una pasada y gran parte de la culpa la tiene su poderoso motor. Monta un bloque turbodiésel de 3 litros y seis cilindros en línea que en esta versión G 400d entrega 330 CV de potencia y un par motor máximo de 700 Nm.

Prueba Mercedes Clase G 2022

Estas cifras hacen que al Mercedes Clase G 2022 de esta prueba no le falte empuje en ningún momento. Sus prestaciones son espectaculares, acelera de 0 a 100 km/h en 6,4 segundos y alcanza una velocidad máxima de 210 km/h. Esta bestia homologa un consumo según el ciclo WLTP de 10,8 l/100km, aunque a la mínima se pone en 13 litros haciendo una conducción normal. Hay que decir que tampoco me parece excesivo, ni mucho menos.

Parece un avión. No llega a la sensación del G 63 AMG, pero cuando pisas el acelerador el morro se levanta de tal manera que ves el cielo en vez de la carretera. Y a partir de ahí, solo te queda pasarlo bien. Pasarlo bien y disfrutar de su comodidad, uno de los grandes valores añadidos del nuevo Clase G. El anterior era tosco y rudo, pero este es muy refinado.

En el habitáculo destaca su suavidad de marcha y su gran aislamiento, algo muy logrado ya que la aerodinámica del modelo es más bien nula. Pero molón es un cacho. Si somos sinceros, conducir este coche es una sensación difícil de igualar por cualquier otro modelo… es como retroceder muchos años por dimensiones y capacidades pero con una calidad y tecnología más propia del futuro.

El Mercedes Clase G debería salvarse de la quema de los modelos de combustión. Esta máquina debería mantenerse porque, aunque el EQG eléctrico será una pasada, habría que mantener las dos versiones simultáneamente en la gama del fabricante alemán. Termino hablando de su caja de cambios: automática con convertidor de par de nueve relaciones que destaca por su suavidad en marcha.

Prueba Mercedes Clase G 2022

Con grandes cambios interiores

El interior del Mercedes Clase G es donde más cambios encontramos en esta generación. Si por fuera vemos un estilo clásico por dentro es todo lo contrario, ha sufrido una revolución tecnológica. Para entrar debería de tener una agarradera, ya que la altura hace que sea un poco costoso. Pero una vez dentro la postura es sencillamente perfecta. Los asientos, forrados en un cuero de mucha calidad, presentan costuras en rojo de AMG. Son calefactados y ventilados en tres posiciones a la par que tremendamente cómodos.

En especial los reposacabezas, con un mullido que me gusta mucho. Otro detalle a destacar de estos asientos son las orejas. Cuando tu cuerpo se desplaza hacia un lado por la inercia en una curva, la propia oreja te empuja hacia el contrario, una pasada. Seguimos con el volante, típico de AMG con costuras en rojo, cuero microperforado a los lados y botones físicos para audio, control de velocidad, etc. Pero también tiene dos táctiles, uno para la instrumentación y otro para el sistema de infoentretenimiento.

La instrumentación de 12,3 pulgadas es completamente configurable a través de los diales, donde puedes ver las fuerzas G, la navegación, datos relativos al ordenador de a bordo, etc. El sistema de infoentretenimiento, que junto con la instrumentación pertenece al sistema MBUX, tiene también 12,3 pulgadas, conectividad total Android Auto y Apple CarPlay y además está ligado en este caso a un sistema de audio Burmester con 15 altavoces que suena impresionante.

La consola central cuenta con botones físicos para la radio, climatizador, etc. También hay en ella un guiño al pasado que me encanta como es su reloj analógico. En cuanto a calidades está a un nivel muy alto, propio de un coche de su precio. Todo está muy bien ensamblado y hay detalle como molduras en acabado de fibra de carbono. Hay bastantes huecos, algunos muy grandes y otros pequeños como la guantera. También hay tomas de 12V, USB y para tarjeta SD. Como detalles a mejorar hay dos cosas: la apertura de las puertas (un poco baja) y los botones del elevalunas, poco intuitivos.

Después de ‘escalar’ a las plazas traseras hay mucho espacio

Para entrar a las plazas traseras la apertura de las puertas podría mejorarse y también se podría facilitar la subida con una agarradera, ya que estamos ante un coche muy alto. Pero una vez dentro nos encontramos con mucho espacio y alguien de dos metros cabría perfectamente. Además, los asientos son tan cómodos como los delanteros. Delante de las plazas traseras hay pantallas para poder ver por ejemplo una película. Los asientos laterales son calefactables en tres posiciones, salidas de climatización y regulación independiente. Hay cenicero y multitud de huecos.

El maletero tiene su cosa. La apertura es lateral, y la puerta pesa lo suyo. Cubica 454 litros y está a una altura perfecta. Cuenta con útiles como multitud de ganchos, toma de 12 V y una red para guardar objetos. Además hay un recubrimiento plástico para mantener limpia la moqueta. Si este espacio te parece poco siempre puedes abatir la segunda fila en disposición 60/40. Tienes que hacerlo desde las plazas traseras y hay que levantar la banqueta para poder abatir el respaldo.

Motores, acabados y precios

El Mercedes clase G tiene un precio que parte de los 126.138 euros según el configurador de la marca de la estrella. Barato no es, eso está claro, pero en cuanto te subes a él entiendes por qué piden esa cantidad por él. Si quieres esta versión de la prueba del Mercedes Clase G tienes que desembolsar 4.000 euros más.

La gama de motores cubre a la perfección las demandas de los clientes potenciales de un modelo así. Ofrece dos mecánicas diésel, el 350d de 286 CV y este 400d con 330 CV; y otras dos mecánicas de gasolina, el G500 de 422 CV y la deportiva G 63 AMG de 585 CV.

Prueba Mercedes Clase G 2022

Pero, ¿sabes qué? Que esta última, que tiene un precio de 188.311,84 euros, es la versión más vendida de su oferta. Evidentemente, cualquiera de las versiones disponibles cuenta con tracción integral a las cuatro ruedas y cambio automático de nueve relaciones.

Conclusión de la prueba del Mercedes Clase G 2022

Al finalizar la prueba del Mercedes Clase G 2022 hay que esperar a dejar de babear para poder expresar mi opinión sobre este monstruo. Es un coche impresionante, con unas capacidades sobresalientes fuera del asfalto y sobre él. Y lo mejor es que todo ello lo hace sin perder un ápice de confort y lujo.

Prueba Mercedes Clase G 2022

No hay palabras malas para esta belleza. Un diseño clásico equipado con los mayores avances tecnológicos que debería perdurar en el tiempo. Es caro, sí, pero vale lo que cuesta. Y creo que está claro que tras el análisis del Mercedes Clase G poco hay que decir. Es una pasada.

Ficha técnica del Mercedes Clase G

  • Medidas (largo/ancho/alto): 4.820/1.930/1.970 mm.
  • Puertas: 5.
  • Plazas: 5.
  • Peso: 2.429 kg.
  • Combustible: diésel.
  • Tracción: 4x4.
  • Altura libre al suelo: 24,1 cm.
  • Motor: 2.925 cc.
  • Potencia: 330 CV.
  • Par motor máximo: 700 Nm.
  • Cambio de marchas: automático de nueve relaciones y convertidor de par.
  • Velocidad máxima: 210 km/h.
  • Consumo de combustible en ciclo combinado: 10,8 l/100km.

Galería de imágenes