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Prueba del Ford Focus Active: tan bueno como un Focus, pero más molón

Un poquito más alto, unas protecciones y... ¡voilà! Maravilloso.

Prueba del Ford Focus Active

Tenía mis dudas antes de hacer la prueba del Ford Focus Active. Para qué nos vamos a engañar. Por regla general, cuanto más te gusta conducir sueles preferir una posición de conducción más baja. Pero hay veces que la fórmula de crossoverizar un coche funciona, y esta es una de ellas. ¿Cuál es mi opinión del Ford Focus Active? Pues buena. Genial, la verdad. Y por eso me gustaría contarte cómo ha sido tenerlo unos días de prueba de manera minuciosa.

Empecemos por fuera

Es prácticamente imposible darse cuenta a simple vista, pero en esta prueba del Ford Focus Active he comprobado que se trata de un coche un poquito más largo que el Focus estándar, 2 cm, llegando hasta los 4,40 m. Además, también es 2 cm más ancho, con 1,84 m de anchura. E igualmente resulta 3 cm más alto, con 1,50 m de altura. Pero la batalla tiene la misma (y estupenda) cota que en la versión berlina, con 2,70 m. Repasadas las medidas, vamos a ver qué cambios tiene por fuera.

El diseño es el que cabría esperar en un Ford Focus normal, pero con unas protecciones plásticas en los bajos, unos paragolpes diferentes, la clásica chapita diferenciadora de esta versión al final de los pasos de rueda delanteros y una altura algo mayor. Ya está. Esa es una de las razones por las que pienso que esta variante va a triunfar como la Pepsicola, ya que el Focus me pareció un productazo. Y si no te lo crees, mira el vídeo de aquí abajo.

Así que lo dicho. Se podría decir que la única diferenciación estética de este modelo está en que se encuentra crossoverizado. Es normal y una receta que ya sabes que va a funcionar de antemano. Los SUV lo están petando y no veo por qué un coche como este no puede triunfar más si cabe. Especialmente cuando la dinámica de conducción frente a un SUV, salvo excepciones muy contadas como el Cupra Ateca, por ejemplo, es mucho mejor. Además, se me ocurren pocos rivales directos a parte del nuevo Kia X-Ceed.

Y por dentro, ¿qué tal?

Pues lo cierto es que por dentro sí que es directamente clavado a un Focus estándar. Tiene una tapicería específica de esta versión, y ya está. Eso es en lo único que se diferencia. Bueno, con respecto al ST-Line que probamos también veo que le falta la palanca del cambio de marchas, que ha sido sustituida por un mando giratorio, y por las costuras. ¡Ah! Y el volante. El bendito y mullido volante de las versiones ST-Line de Ford. Las comparaciones con el aro del volante convencional son odiosas, así que sigo.

Las calidades son generalmente muy buenas, quitando algún plástico duro que se encuentra en las partes más bajas. En donde casi nunca se toca con las manos. Todo está acolchado y los ajustes son satisfactorios. ¿Conclusión? Parece que con el paso del tiempo el deterioro será mínimo. Además, hay huecos por todos lados, y me encanta que delante del cambio exista una plataforma para cargar el teléfono de forma inalámbrica. Creo que debería ser obligatorio por ley. Por cierto, dos detalles geniales: me encanta que se pueda acceder al maletero desde las plazas traseras a través de un hueco en el reposabrazos; y lo de abrir las puertas y que recubra el borde una goma es sencillamente perfecto.

Prueba del Ford Focus Active interior

Espacioso como ninguno

Como en el Focus berlina, cuenta con una consola central con los botones físicos justos, así como con una generosa pantalla multimedia de 8 pulgadas. La única pega que le encuentro es que la vista del navegador es algo confusa. La pantalla se parte en dos, una para la vista normal y otra para una visión cenital, justo como si estuviéramos encima del vehículo. A mi me ha confundido más de una vez.

Por lo demás, conectividad total, respuesta muy rápida, buenos gráficos y un control por voz magnífico gracias al sistema de infoentretenimiento SYNC3. La instrumentación es semi digital. Tiene agujas analógicas pero se retroilumina cuando el coche está encendido. Me ha gustado mucho. No falta la típica pantalla LCD entre el cuentakilómetros y el cuentarrevoluciones que hace las veces de ordenador de a bordo.

Detrás podría sustituir a la antigua berlina que solías tener en casa. En esta prueba del Ford Focus Active he confirmado mis sospechas: es el compacto con más amplitud detrás en el que me he montado. Sin embargo, el maletero se queda en un simple aprobado, con 375 litros de capacidad. De todos modos, la banqueta trasera es abatible y en ese caso la cifra crece hasta los 1.354 litros. Not bad.

Prueba del Ford Focus Active drone

Prueba del Ford Focus Active: ¡en marcha!

Era un secreto a voces: montarse y salir del Ford Focus Active es más fácil gracias a su mayor altura libre con respecto al suelo. La visibilidad también mejora al estar en una posición más alta. Sin embargo, lo mejor es que la conducción comparado con un compacto cualquiera de una forma en la que lo vayas a notar en tus desplazamientos del día a día. Como sí pasa en un SUV, por cierto.

El tacto de la dirección no es gran cosa, ya que no transmite prácticamente nada. Además, tiene bastante juego muerto y es poco directa. Pero la suspensión es otra cosa. Se complementa con el chasis que da gusto y hace que el Focus Active sea un coche comodísimo. Es uno de sus puntos a favor más destacados. Se muestra firme en los cambios de apoyo y no balancea casi nada. Aun así, al pasar por terreno irregular los baches se filtran genial.

150 CV y cambio automático

Nuestra unidad en esta prueba del Ford Focus Active está ligada a un propulsor de gasolina EcoBoost de 1.5 litros con 150 CV de potencia. ¡Y tres cilindros! Hace unas pocas semanas lo probé con 182 CV, y este escalón de potencia me parece bastante más sensato. Porque corre mucho y se corta más en el consumo. Homologa una media de 7,1 l/100km, y aunque se queda corto no suele pasar de los 8,5 l/100km.

Prueba del Ford Focus Active motor

Esto con una caja de cambios automática de convertidor de par y ocho relaciones. Tenía mis reservas, ya que hace tiempo la probé con un motor diésel y las sensaciones no fueron para nada buenas. Pero con la mecánica de gasolina casa a la perfección. No es tan rápida como una de doble embrague, pero sí que resulta muy cómoda. Y si quieres cambiar de manera manual siempre puedes hacerlo a través de unas levas que, eso sí, son pequeñísimas. Aunque el hecho de que se muevan solidariamente con el volante ayuda a saber dónde están en cada momento.

La potencia se entrega de forma lineal, no hay un patadón cortesía del turbo. Pero lo cierto es que empuja mucho. El máximo lo da a las 6.000 rpm, pero el par máximo de 240 Nm ya está presente desde las 1.600 rpm, muy pronto. Con todo este batiburrillo de cifras, la aceleración de 0 a 100 km/h la completa en 9,7 segundos, mientras que la velocidad punta es de 204 km/h. Basta y sobra para cualquier usuario medio.

Mucha, mucha tecnología

Las tecnologías que van ligadas a la comodidad y a las ayudas a la conducción son muchas. Cámaras por todos lados con sensores de aparcamiento, la mencionada pantalla de 8 pulgadas con conectividad, climatizador de varias zonas, frenada automática de emergencia, lector de señales de tráfico, avisador de ángulo muerto… Por rizar el rizo, me gustaría que el Head-Up Display se reflejase directamente en el cristal, y no en un panel transparente retráctil sobre la instrumentación.

Conclusión y precios

Lo mejor que ofrece el Ford Focus Active es una buena dinámica de conducción con una altura libre al suelo superior a la de un turismo convencional. Además, es comodísimo. Depende de la configuración mecánica que escojas el hecho de que corra más o menos, o gaste más o menos combustible. Pero lo que está claro es que por concepto es un acierto. Como ya he dicho, solo el Kia X-Ceed, su rival más directo (y prácticamente el único), es el que puede ponerle las cosas complicadas. Pero hay mercado para ambos.

Así que si necesitas un vehículo algo levantado del suelo pero no quieres renunciar a ir en una berlina, este es el coche que necesitas. Según la web de Ford, está disponible desde 23.800 euros con el motor de gasolina de 125 CV. También está este de 150 CV, y en diésel con 120 y con 150 CV. Todos se pueden elegir con cambio manual o automático, pero por desgracia ninguno ofrece tracción a las cuatro ruedas. Una pena que, dicho sea de paso, no empaña un estupendo coche.

Nota HolyCars TV: 9.

Prueba del Ford Focus Active tapicería

Ficha técnica

  • Medidas (largo/ancho/alto): 4.397/1.844/1.502 mm.
  • Puertas: 5.
  • Plazas: 5.
  • Maletero: 375 litros.
  • Peso: 1.404 kg.
  • Combustible: gasolina.
  • Motor: 1.496 cc.
  • Potencia: 150 CV.
  • Par motor máximo: 240 Nm.
  • Cambio de marchas: automático de ocho velocidades.
  • 0 a 100 km/h: 9,7 segundos.
  • Velocidad máxima: 204 km/h.
  • Consumo de combustible en ciclo combinado: 7,1 l/100km.

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