Una de las principales virtudes del BMW M2 es que su tamaño reducido le permite tener un comportamiento extraordinario, pero comparado con su hermano mayor M4 siempre ha salido perdiendo en cuanto a potencia. Pues bien, con el nuevo BMW M2 CS la marca bávara ha dado justo en el clavo: fabricar un M2 con potencia de M4, o un M4 con tamaño de M2… como prefieras.
En efecto, este CS es el M2 definitivo. Para empezar, porque recibe un aumento MUY importante en la potencia, que pasa de los 410 CV del M2 Competition a los 450 de esta edición especial. Y también porque mantiene su excelente cambio manual y porque sus mejoras estéticas y su puesta a punto específica lo convierten en un coche ideal para pasárselo en grande en circuito.
450 CV, 0-100 km/h en 4 segundos y cambio manual
Vamos a analizar minuciosamente sus principales características, porque vale la pena fijarse en todos los detalles. El motor del BMW M2 CS es el mismo que el del M2 Competition -de 3.0 litros, 6 cilindros y dos turbos- pero su potencia ahora es de 450 CV y su par de 550 Nm. Esta cifra es absolutamente espectacular porque no solo supera la potencia de serie del M4 (431 CV) y la iguala con respecto al Pack Competition de su hermano mayor, sino que se mete de lleno en el terreno del Porsche 911 Carrera S, que cuenta exactamente con la misma potencia, 450 CV. De hecho, tan solo se queda a 10 CV de la potencia del M4 CS…
Con unas cifras tan espectaculares es evidente que sus prestaciones están fuera de cualquier duda. La aceleración de 0 a 100 km/h se realiza en 4 segundos -4,2 para la versión manual- y la velocidad máxima está limitada electrónicamente a 280 km/h. La buena noticia para los más puristas es que la el sistema encargado de transmitir toda esa potencia al asfalto es una caja de cambios manual de seis velocidades, que además se instala por primera vez en un modelo CS de BMW. Si prefieres optar por un cambio automático no te preocupes, porque la marca ofrece también la transmisión M DCT de doble embrague y 7 relaciones. ¡Ah!, se me olvidaba mencionar que toda la potencia se dirige al eje trasero, como buen BMW M2 que es.
Tecnología punta perfecta para circuito
La marca no se ha limitado a aumentar la potencia del M2, sino que ha introducido una serie de mejoras que lo hacen uno de los mejores candidatos para un track day. Por primera vez el BMW M2 CS equipa la suspensión adaptativa M, hasta ahora reservada a los M4, así como los neumáticos Michelin Pilot Sport Cup 2. La configuración de los amortiguadores se puede modificar mediante los modos de conducción Comfort, Sport y Sport+.
Por otra parte, el equipo de frenos está puesto a punto específicamente para este modelo, y cuenta con unos discos delanteros de 400 mm y traseros de 380, así como unas pinzas más grandes pintadas en color rojo -de seis pistones delante y cuatro detrás. En cualquier caso, si todo esto te sabe a poco la marca ofrece en opción los frenos carbocerámicos.
Además, el M2 CS equipa un Diferencial Activo M, que hace de autoblocante mecánico con control electrónico y se une a un control de estabilidad específico para ofrecer un comportamiento muy deportivo y la posibilidad de realizar derrapes controlados al seleccionar el M Dynamic Mode. Para acabar de rizar el rizo, la marca alemana ha equipado su deportivo con un sistema de retorno de aceite cerca del turbo, para mantener su circulación y garantizar su lubricación incluso yendo al límite en circuito.
BMW M2 CS: todavía más bonito, si es que era posible
Por último, pero no por ello menos importante, es necesario destacar las mejoras estéticas que BMW ha introducido a un coche que, a mi parecer, ya era de los más bonitos de la gama. A las necesarias tomas de refrigeración del capó -que por cierto, está rediseñado y fabricado en plástico reforzado con fibra de carbono, del mismo modo que el techo- se le suman otros elementos de fibra de carbono, como el splitter delantero, el alerón o difusor trasero.
También son novedad las preciosas llantas de 19 pulgadas en color negro o el dorado mate opcional que ves en las imágenes. Como todo en este coche está pensado para ahorrar peso cada llanta pesa tan solo 9 kg. Finalmente, en el exterior destaca el sistema de escape, actualizado con respecto al del M2 Competition, y su precioso color Misano Blue, exclusivo de esta edición.
Si pasamos al interior, vemos que el objetivo de la marca ha sido el mismo: transmitir una deportividad espectacular y combinarla con un notable ahorro de peso. Es por ello que la consola central está fabricada en CFRP (el mismo material que el capó o el techo), así como los tiradores y las molduras de las puertas. Por su parte, los asientos son muy ligeros y están tapizados en cuero Merino y Alcántara.
De hecho, este último material es también el encargado de tapizar el volante opcional M Sport, la tapicería del reposabrazos central o la moldura del salpicadero. Todo ello, combinado con unas costuras en contraste en color rojo. El nuevo modelo de la marca, que servirá de base para el desarrollo de la versión de circuito M2 CS Racing, llegará a los concesionarios el año que viene.
Mis padres dicen que cuando era pequeño me aprendí antes las marcas de coches que la tabla del 1. Ahora me sé todas las marcas, pero si sumo 2+2 me da decimal. Los coches son mi pasión, mi sueño era probarlos y escribir sobre ellos algún día… y aquí estoy. Aunque bueno, también me gusta la pizza y no ando escribiendo de ella por ahí.